31.7.25

Manual para decir NO a encargos de último minuto

 

🧵 Diario de una Tejedora en Apuros - Día 18

Día 18: Tejiendo bajo presión — o cuando tu cuñada quiere “algo fácil” para mañana

Todo comenzó con un mensaje inocente:

“¿Tú que haces esas cosas tan bonitas con lana… podrías hacerme un gorrito para mañana?”

¿Para mañana?
¿Mañana mañana? ¿Tipo 24 horas mañana?
¿Y “esas cosas” es cómo le llaman ahora al arte textil?


🏃‍♀️ Tejido a contrarreloj

El reto: gorro con orejeras, “que no pique”, “que sea negro pero con onda” y “si se puede, con su nombre bordado”.

Lo que escuché:

Haz magia textil con expectativas imposibles y cero tiempo.



📈 Fases del tejido exprés

  1. Negación: Esto no puede ser tan difícil.

  2. Ira: ¿Por qué acepté esto? ¿¡POR QUÉ!?

  3. Negociación: Si no lleva orejeras... ¿realmente importa?

  4. Depresión: El hilo se acabó. También mi fuerza vital.

  5. Aceptación: Tejo. Lloro. Repito.


💡 Consejo para futuras “urgencias” textiles

  • Di que no.

  • O di que sí, pero hazlo tú... a tu ritmo, y entregas en Navidad.

  • O haz lo que hice yo: crear un gorro decente y envolverlo con ironía.

Nota de regalo incluida:

Hecho con amor y 6 cafés. No apto para lavar ni para repetir por encargo.


🧶 Reflexión del Día

Tejer rápido no es lo mismo que tejer bien.
Pero a veces, tejer con cariño en condiciones imposibles es lo más real que podemos ofrecer.

Y sí, la cuñada quedó feliz.
Porque aunque lo pidió mal…
yo tejo con el corazón. Y con ampollas.

30.7.25

🧵 Diario de una Tejedora en Apuros - Día 17

Día 17: El misterio del punto que desaparece

Hoy iba todo bien.
Monté los puntos. Empecé a tejer. Sonaba música de fondo. Me sentía como una diosa del hilo.
Hasta que… un punto desapareció.

Literalmente. No estaba. Lo conté tres veces.


🔍 El caso del punto perdido

Tejía en circular. Iba por la vuelta 12. De repente, un hueco en la trama. Como si alguien hubiera dicho: “a este punto, no lo invites a la fiesta”.

¿Se cayó? ¿Saltó? ¿Fue abducido?


🧠 Diagnóstico:

  • Aguja mal posicionada: el gancho no recogió el hilo.

  • Tejí demasiado rápido, como si corriera una maratón de punto.

  • Tal vez un fantasma textil quiso probar algo nuevo. (Teoría no comprobada.)


🧵 La reparación (aka cirugía textil)

  1. Identifiqué el hueco (tras 10 minutos de pánico).

  2. Usé un ganchillo para “resucitar” el punto caído.

  3. Lo subí con cuidado por cada vuelta hasta alcanzar el nivel actual.

  4. Lo aseguré con un pequeño punto doble… y un rezo.


💡 Consejo pro (aprendido a la mala):

Ten a mano un ganchillo pequeño siempre.
Nunca sabes cuándo un punto va a tener crisis existencial.


🤯 Reflexión del Día

Perder un punto te hace valorar cada uno de los que se quedan.
Como en la vida: a veces lo que falta te enseña más que lo que está.

Y no, no lloré. Fue alergia al algodón.

29.7.25

🧵 Diario de una Tejedora en Apuros - Día 16

Día 16: El patrón que me hizo dudar de mi inteligencia

Hoy encontré un patrón que me enamoró a primera vista.
Decía: “Nivel: fácil”.
Pensé: “¡Esto lo hago con una mano y media taza de café!”

Dos horas después, estaba googleando “qué significa 2pd, 1pa, sl tbl en idioma humano”.


🧠 El lenguaje oculto del patrón

¿Por qué los patrones vienen en abreviaciones que parecen contraseñas de Wi-Fi?
Me encontré con líneas como:

*2pd, 1pa, sl tbl, rep hasta fin, girar, tejer como se presenta*

¿Tejer cómo se presenta? ¿Dónde se presenta? ¿Hay una presentación oficial?


🧶 Lo que aprendí (después de llorar un poco)

  • 2pd = dos puntos derecho

  • 1pa = un punto al revés

  • sl tbl = desliza punto tomando por la hebra trasera

  • “tejer como se presenta” = sigue el dibujo que ya tienes

Conclusión: el patrón no era difícil… yo solo no hablo idioma tejido fluido.


☕ Herramientas de supervivencia para estos casos

  1. Tener una chuleta de abreviaciones cerca.

  2. YouTube es tu nuevo mejor amigo.

  3. No empezar patrones “fáciles” sin haber dormido bien.

  4. Aceptar que si no entiendes, no es tu culpa. Es culpa del patrón y su ego.


✨ Reflexión del Día

A veces el tejido no es difícil, solo está mal explicado.
Como cuando pides direcciones y te dicen: “gira donde estaba la panadería que ya no existe”.

Pero al final, punto a punto, se entiende.
Y sí: terminé el patrón.
Con orgullo. Y con subtítulos en mi cabeza.